El voltaje de la batería del coche es indispensable para el adecuado funcionamiento del vehículo, pero también para evitar accidentes y averías en el dispositivo. Cuando es nuevo o de ocasión no debes preocuparte, pues el vendedor verifica que el coche tenga la batería adecuada. Pero, con el uso y el tiempo, esta puede necesitar sustitución. Aquí es cuando te preguntas cuál es la importancia del voltaje de la batería de coche y qué hacer en caso de descarga.
¿Para qué sirve la batería del coche?
Todos los coches, eléctricos o de combustión, requieren de una batería. En el caso de los vehículos tradicionales, que funcionan con diésel o gasolina, muchos experimentan, con los años, problemas en la batería. Buena parte de los conductores alguna vez se han quedado sin batería. ¿Por qué ocurre esto? ¿Es problema del voltaje de la batería del coche? ¿Cómo solucionarlo? Aunque la solución más eficaz en caso de descarga es pasarse corriente de un coche a otro, esto solo es un remedio temporal.
¿Y cuál es el voltaje de la batería del coche? ¿Por qué es importante? ¿Para qué sirve la batería? ¿Cómo funciona? La gran mayoría de las baterías se descargan porque el conductor se deja las luces encendidas. Algo bastante común y con lo que deberías tener cuidado para no llevarte sorpresas al día siguiente.
Las baterías son dispositivos que sirven para acumular energía eléctrica. Esta energía se obtiene a través de procesos químicos y todas funcionan más o menos de la misma manera. Es decir, el principio de funcionamiento de la batería de un coche es similar al de otro vehículo de combustión. Están equipadas con dos electrodos, uno con carga positiva y otro con carga negativa, que se sumergen en un electrolito que lo divide en iones.
Gracias a las baterías es posible almacenar energía y liberarla a manera de corriente continua. En el caso de los coches, debido a ellas el motor puede arrancar y mantenerse en funcionamiento todo el tiempo que necesites circular por el asfalto. Las baterías de los coches utilizan electrodos de plomo que se sumergen en una solución de ácido sulfúrico diluido en agua. La ventaja es que pueden recargarse. Como ya has visto, cuando un coche se queda sin pila, puedes utilizar otro coche o fuente de corriente eléctrica para recargar dicha batería.
Los problemas en las baterías
El problema es que, a largo plazo, la sulfatación de la batería puede hacer que ésta quede inutilizable. Esto puede ocurrir porque los electrodos convierten el plomo en sulfato de plomo. De ahí que se forme una especie de película blanca en la batería y sus terminales. En teoría, esta sulfatación podría evitarse siempre y cuando el coche se utilice de forma adecuada. Por ejemplo, no dejando el coche encendido durante mucho tiempo si no estás en marcha. ¿Esa hora mal aparcado esperando a alguien y con el coche en funcionamiento? ¡Puede ser un error para la batería!
Por otra parte, las baterías también se atrofian por la autodescarga. Esto ocurre cuando el líquido electrolítico baja a consecuencia de la evaporación. El problema de la autodescarga es que suele haber cortocircuitos que dejan a las baterías totalmente fuera de circulación.
Verifica los amperios y el voltaje de la batería del coche
Algo que muchos usuarios pasan por alto es el voltaje de la batería del coche, así como el amperaje de la misma. Puedes saber ambos datos mirando directamente la batería o consultando el manual del vehículo. Su capacidad es muy importante si, por ejemplo, al momento de la descarga, la recargas de más. ¡Evita condutas que pueden estropear la vida útil de la batería y de tu automóvil!
Los datos que debes conocer para saber cuál es la capacidad de la batería son:
- Voltaje. Se expresa en voltios (V).
- Amperaje. Se mide en amperios por hora (Ah).
- Potencia de arranque. Esta información se mide en amperios (A).
El voltaje de la batería del coche hace referencia a la tensión nominal del dispositivo. Un coche convencional suele tener una batería de 12V, mientras que un camión o vehículo pesado puede tener una del doble de capacidad, es decir, 24V. Esto solo aplica para los vehículos que funcionan con combustibles fósiles, pues los eléctricos tienen baterías con un funcionamiento diferente. El voltaje es importante para todos los sistemas eléctricos de un dispositivo: las luces internas y externas, la centralita, etcétera.
Cuando se habla de amperaje, entonces se hace referencia a una energía sostenida que puede aportarse durante la descarga. Si una batería tiene 45 Ah quiere decir que puede aportar 45 amperios mientras se descarga. Por su parte, la potencia de arranque de la batería es la cantidad de energía que el dispositivo aporta al coche cuando se arranca el motor, es decir, cuando se pone en funcionamiento. Todo dispositivo aparcado necesita de mucha energía para ponerse en marcha, aunque sea durante pocos segundos. De ahí que la potencia sea tan importante y elevada (300 A, por ejemplo).