¿Sabes qué vehículos deben tener un seguro obligatorio de responsabilidad civil? Cuando una persona adquiere un vehículo, son muchas las dudas que pueden llegar a surgir debido a la normativa existente. Esta, según pasa el tiempo, va cambiando y normalmente va siendo más exigente con el fin de que aumente la seguridad en las calles de cualquier municipio. Por ello, a la hora de circular con un medio de transporte, ya sea un coche o una bicicleta, lo recomendable es analizar cuáles son las obligaciones y los derechos que existen en estas circunstancias. Solo así será posible evitar multas que, de otra manera, seguramente habría que hacer frente.
Vehículos que deben contratar un seguro obligatorio de responsabilidad civil
Saber qué vehículos deben tener un seguro obligatorio de responsabilidad civil es esencial si no queremos tener una sorpresa desagradable el día de mañana. Es evidente que un turismo debe contar con este tipo de seguros para que el titular pueda hacer frente a cualquier contratiempo. Sin embargo, para aquellos a los que les encanta utilizar medios de transporte ecológicos, como puede ser el patinete eléctrico o la bicicleta, para ir al trabajo o acercarse a cualquier punto dentro de un municipio, es esencial que se informen sobre qué deben o no hacer ante esta responsabilidad. La razón es que las normas van cambiando y se van adaptando a los nuevos tiempos. Por ello, siempre es ideal saber qué debe hacer cada uno a la hora de salir a la calle con un medio de transporte determinado.
La obligatoriedad del seguro obligatorio
Aunque muchos no lo crean, la respuesta a la pregunta sobre qué vehículos deben tener un seguro obligatorio de responsabilidad civil es bastante obvia. Y es que todos los vehículos a motor, ciclomotores, remolques y semirremolques tienen que contratar un seguro de estas características. Se trata, como su propio nombre indica, de un seguro obligatorio por ley. Por ello, cuando se quiere conducir un medio de transporte para el que se necesita un permiso de circulación, es necesario hacer frente a un servicio de estas características. De este modo, existirá una responsabilidad ante cualquier contratiempo que pueda tener lugar.
¿Qué servicios ofrece el servicio obligatorio de responsabilidad civil?
Es cierto que cada aseguradora puede establecer unos criterios específicos dentro del seguro obligatorio. Por supuesto, siempre tienen en cuenta los mínimos que la ley fija. De este modo, este siempre cubrirá la indemnización que deba darse a un tercero en caso de cualquier altercado con el vehículo. Asimismo, cuando en el accidente se hayan visto implicados los acompañantes del conductor responsable de lo ocurrido, estos también recibirán la protección que necesiten por parte del seguro obligatorio. Por ello, solo el conductor quedará desprotegido del altercado. Sin embargo, cada vez son más las compañías que son conscientes de la necesidad de proteger también a este último.
Teniendo en cuenta lo anterior, hay que saber que la cobertura del seguro obligatorio tiene un límite y, por ello, en ocasiones este servicio puede dejar desprotegidos a algunos usuarios. De esta forma, las aseguradoras recomiendan, a veces, apostar por el seguro de responsabilidad civil voluntaria. En estos casos, cada empresa concreta unos criterios respecto a la cantidad de dinero que llega a cubrir el seguro en caso de accidente. Ahora, lo habitual es que la cifra ronde los cincuenta millones de euros (los daños materiales del seguro obligatorio básico son de quince millones). Por supuesto, este seguro es totalmente voluntario. Sin embargo, se trata de una forma de vivir más tranquilo. Así, si uno se ve implicado en un accidente grave, podrá estar tranquilo de que su seguro se hará cargo de la mayoría de problemas que se desarrollen.
Otro tipo de seguros
Por otro lado, son muchas las personas que quieren sentirse tranquilas ante cualquier percance que pueda tener lugar cuando se conduce o cuando se tiene un coche, incluso aparcado. Por ello, siempre existe la posibilidad de contratar un seguro más amplio cuyas coberturas sean mayores y protejan aún más el coche en sí y a los usuarios que viajen en su interior en todo momento. De este modo, el seguro a terceros ampliados permite proteger, por ejemplo, la luna de los coches y los daños que se puedan ocasionar si se produce un incendio. Se trata de circunstancias que quizás no sean tan habituales, pero dormir tranquilo sabiendo que el coche va a ser reparado si sufre algún problema como los nombrados anteriormente, es toda una ventaja.
Asimismo, para los que quieran olvidarse de cualquier problema, siempre pueden optar por el seguro a todo riesgo. Este hace frente, incluso, a los golpes que el vehículo puede sufrir cuando se encuentra aparcado. Por ello no importa si un día te levantas y ves que tu coche se encuentra en peores condiciones que el día anterior, ya que la aseguradora hará frente a este problema.
